Para iniciar un camino como el de este libro, nada mejor que hacerlo partiendo de la historia, dando un salto hacia atrás en el tiempo, para recuperar desde aquellos momentos nuestro sitio en este microcosmos. Y mientras compartimos fotos antiguas y sacamos de las arcas la indumentaria tradicional, recogemos topónimos y recordamos el vocabulario local o leemos actas de la parroquia y los concejos escritas por nuestros mayores, no sólo pretendemos rendirles homenaje, sino también seguir aprendiendo para conocernos mejor.